El Aeropuerto de Asturias ha realizado hoy un simulacro de emergencia general aeronáutica siguiendo la normativa de la OACI (Organización de Aviación Civil Internacional) y de acuerdo con el Plan de Emergencias del aeropuerto. El objetivo de este ejercicio es comprobar y evaluar los procedimientos de actuación y coordinación establecidos en el Plan de Autoprotección del Aeropuerto, entre los que se encuentra analizar la eficacia de los procedimientos y el grado de conocimiento e integración de todos los colectivos implicados, internos y externos, en la atención de una emergencia aeronáutica. El ejercicio ha consistido en la simulación de un accidente aéreo en el que un avión de la compañía Ryanair, tipo Boeing 737-800 con 167 personas a bordo (162 pasajeros y 5 tripulantes), se sale de pista debido a condiciones meteorológicas adversas de fuertes lluvias y viento durante el aterrizaje y la aeronave se parte en dos. Como consecuencia, 20 personas resultan heridas de diversa consideración y 4 fallecidas.
La operatividad del aeropuerto no se ha visto afectada por la realización de este ejercicio.
Colectivos participantes En el simulacro se han involucrado diferentes colectivos de Aena y de organizaciones externas. Por parte del aeródromo han participado las unidades encargadas de la actuación de los diferentes servicios aeroportuarios ante una emergencia de estas características y ubicación, para la activación de salas de atención a la emergencia, constitución de los puestos de mando del aeropuerto, disposición de medios a requerimiento de los mandos en la emergencia, apoyo técnico y presencia en el puesto de mando avanzado del PLATERPA: Dirección del Aeropuerto, la Torre de Control, Operaciones, Seguridad, AAPUC (Apoyo y Atención a Pasajeros, Usuarios y Clientes), y responsable de atención a las víctimas. Junto a estos servicios, se han desarrollado las actuaciones propias de la compañía aérea y de su servicio de asistencia en tierra. Como medios externos, han participado la Delegación de Gobierno, el Servicio de Emergencias (SEPA) con, entre otros, sus unidades de puesto de mando avanzado y bomberos, el puesto asistencia avanzado y transporte sanitario del Servicio de Salud (SESPA), la Guardia Civil de la Zona/Comandancia de Asturias (la Unidad de Helicópteros, el Sector/Subsector de Tráfico de Asturias y el Servicio Cinológico, el Destacamento de Seguridad y Fiscal del Aeropuerto, las Unidades de Seguridad Ciudadana y la Unidad Orgánica de Policía Judicial), además del Cuerpo Nacional de Policía, la Policía Local y el Ayuntamiento de Castrillón, la Cruz Roja y el Instituto de Medicina Legal. Este ejercicio se enmarca en el Plan de Autoprotección del Aeropuerto de Asturias, que se mantiene actualizado y operativo mediante la realización periódica, por parte de sus diferentes servicios, de simulacros parciales para poner a prueba y evaluar su capacidad de respuesta. El aeródromo asturiano cumple así con la normativa de la OACI (Organización de Aviación Civil Internacional) en materia de planificación de emergencias en los aeropuertos, y atiende a la legislación que aplican las administraciones nacionales, autonómicas y locales, que obliga al gestor de una instalación aeroportuaria a contar con un Plan de Autoprotección. Esta práctica obedece además al compromiso de Aena de ofrecer un servicio de calidad y seguro. Todos los aeropuertos que componen la red de Aena disponen de un Plan de Emergencias Aeronáuticas que forma parte del Plan de Autoprotección del Aeropuerto, destinado a minimizar las consecuencias que podrían derivarse de un accidente aéreo, tanto en la zona de movimientos del aeropuerto como en el ámbito de sobrevuelo de las aeronaves durante las operaciones de aterrizaje y despegue que éstas realizan diariamente. Su cometido fundamental es garantizar, por un lado, la protección de las vidas humanas y los bienes que pudieran verse afectados por un incidente de ese tipo y, por otro, la continuidad o restablecimiento de la operatividad aeroportuaria.